
El VIH ha sido un tema recurrente en México, con un saldo de 10 mil contagios y más de 4 mil muertes anualmente por covid registrados en los últimos diez años. A causa de la pandemia la reducción de diagnósticos y pruebas, junto al desabasto de medicinas para el tratamiento han empeorado una situación que iba a mejor.
De 2020 a comparación con 2019 se ha reducido la cantidad de pruebas para la
detección del VIH en casi un 50%, también se redujeron a la mitad los diagnósticos,
esto se vio reflejado en el estado tan agravado en el que comenzaron a llegar los
pacientes para recibir atención médica.
La pandemia tuvo mucho que ver en esta situación y es que, a raíz de esta, se
revirtió el ascenso en diagnósticos que estaba comenzando en los últimos años, el 6% de mujeres y el 38% de hombres a nivel nacional, que acudieron a instalaciones de salud lo hicieron cuando su sistema inmunitario ya estaba muy débil, la conocida fase “Sida”.
De acuerdo con declaraciones del exdirector del CENSIDA (Centro Nacional para la
Prevención y el Control del VIH/Sida) Carlos Magis, para Animal Político, los pacientes de VIH que llegan en fase Sida a recibir atención corren el riesgo de
manifestar enfermedades más graves como neumonías u otras.
En el segundo trimestre de 2021 se reportó un aumento de pruebas aplicadas para
VIH de un 36% a comparación del 2020 durante el mismo periodo, hasta junio de este año se han detectado 6 mil 359 casos nuevos, de estos 26.34% se presentaron
en posible fase “Sida”.
Está caída de diagnósticos no solo se atribuye a la pandemia con el cierre de
hospitales y toda la atención de los médicos en casos de covid, son diversos
factores como las personas que llegaron tarde a buscar atención médica y también
el desabasto de medicamentos.
Aunque ya ha comenzado la recuperación en el país de los servicios de salud frente
a la baja de casos y contagios de covid-19, y con ello se empiezan a realizar
pruebas y nuevos diagnósticos, todavía no son suficientes.
Desabasto de tratamiento para VIH en el país
El pasado mes de octubre mediante manifestaciones hechas por pacientes de VIH y activistas del colectivo VIHve Libre se denunciaron el desabastecimiento de
medicamentos antirretrovirales en instituciones y el riesgo de dar un medicamento no prescrito por el CENSIDA.
No solo la molestia radica en la entrega de este nuevo fármaco que pertenece a un
esquema alternativo, también radica en la forma de entrega, que es a través del propio médico y no en farmacia. No conformes con eso el medicamento alterno
cuesta dos veces más que el prescrito normalmente.
Está crisis se vio agudizada en 2019, después de recortes presupuestarios y
cambios en la compra de medicinas impuestos por el gobierno de Andrés Manuel López Obrador, y ahora en 2020-2021 se complicó por la cobertura de la pandemia.
El Semanario Gráfico inició circulación en noviembre de 2020, tras 11 meses de desarrollo. Nuestros primeros pasos en el periodismo lo dimos como Sala de Prensa, proyecto universitario que mantuvo vigencia por más de 7 años.
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